Un composite para todos los casos desde luego suena a algo muy práctico. En efecto, existen unos composites universales que abarcan indiscutiblemente la mayor parte de los campos de indicación en el tratamiento de obturación. Funcionan sin limitaciones en la región posterior y también son aptos para la región anterior. El gran espectro cromático y la baja translucidez del material permiten trabajar a varios niveles de opacidad y, por tanto, consiguen una coincidencia cromática que armoniza con la sustancia dental dura. No obstante, esto supone un alto coste de almacenamiento para colores a los que apenas se les da uso. De ahí surge la técnica de estratificación, un método que consume mucho tiempo. En ese sentido, los composites bulk fill se apuntan un tanto como una alternativa económica al menos para la región posterior. Los peros relacionados con la alta translucidez y con la baja opacidad son desde hace tiempo cosa del pasado. Nuestros composites bulk fill consiguen una estética natural gracias a las tecnologías más modernas.

A diferencia de los composites universales, los materiales bulk fill son más translúcidos para garantizar una alta transmisión de la luz para la fotopolimerización de capas de hasta 4 mm. Sin embargo, el aumento de la translucidez tiene un impacto negativo en la estética. Les hemos hecho frente a estos fenómenos con el desarrollo de la tecnología patentada Aessencio, que supone un aumento del índice de refracción durante la polimerización y hace que los composites de 4 mm que, en un principio, son translúcidos se vuelvan opacos. De esta manera, se obtiene una translucidez final muy similar a la del esmalte y la dentina y, por tanto, una estética muy natural.

Los composites están compuestos por distintos materiales de relleno y una mezcla monomérica. Aunque la combinación monomérica tiene propiedades uniformes ante la refracción de la luz, los rellenos individuales pueden tener las mismas propiedades (índice de refracción) que la mezcla monomérica o una totalmente diferente. Esto significa que cuanto mayor sea la diferencia entre el índice de refracción del relleno y la matriz monomérica, más se refracta la luz y menos translúcido será el composite. Antes de la polimerización, el composite tiene un aspecto translúcido, porque la diferencia del índice de refracción es mínima. Con la tecnología Aessencio, se selecciona el índice de refracción de la mezcla monomérica de tal manera que, durante la polimerización, aumenta la diferencia del índice de refracción y, de este modo, disminuye considerablemente la translucidez. Por lo tanto, el composite se volverá más opaco. Gracias a esta mezcla de rellenos y monómeros, el material adquiere las características ópticas de la sustancia dental circundante y obtiene una buena adaptación cromática.

Los fotoiniciadores absorben la luz en diferentes intervalos de longitud de onda. El iniciador lumínico Ivocerin patentado y desarrollado por nosotros puede absorber la luz en una longitud de onda mayor que los iniciadores convencionales. Por este motivo, se puede activar con todas las lámparas LED y halógenas que se utilizan habitualmente. Los composites que contienen Ivocerin exhiben excelentes resultados en tonos brillantes, como los tonos Bleach, a pesar de su tinte amarillo inicial, requieren una concentración de fotoiniciador considerablemente menor para lograr propiedades similares a las de los fotoiniciadores estándar. Así pues, Ivocerin puede utilizarse como acelerador de la polimerización sin que los composites del color dental (o incluso los tonos bleach) menoscaben la estética con una translucidez similar a la del esmalte.

La estética natural de una restauración bulk fill queda clarísima mediante un caso práctico: Restauración anterior con Tetric PowerFlow y Tetric PowerFill^[1]

^[1] Enggist L. New Fast-cure Composite System for Posterior Restorations – 12 Months Results. Präsentation IADR 2019, https://iadr.abstractarchives.com/abstract/ced-iadr2019-3221849/new-fast-cure-composite-system-for-posterior-restorations-12-months-results